Iba tranquilamente en mi trasporte rumbo a mi casa, cuando me habla mi hermano diciendome que la ventana estaba abierta y que la cantera estaba destruida. Llegue con Orta a mi casa y ví que ciertamente, la ventana estaba abierta y la cantera estaba desprendida de la pared. Entre y estaban los cajones del cuarto de mis padres en el suelo, los alajeros de mi madre vacíos, varias cosas abiertas y mi cuarto completamente esculcado.
Lo bueno(?) fue que los que robaron fueron un par de pendejos que no sabían hacerlo y no se llevaron gran cosa, algunas cosas de valor como las alajas de mi madre, dinero y una cámara de vídeo. Que a fin de cuentas no pasan de lo material, la vida da y quita.
Lo malo(!) fue que se llevaron una de mis guitarras eléctricas y mi xbox.
Aunque haga berrinche ya paso, no voy a recuperar nada. Bueno, quizás si voy a algún tianguis el fin de semana vea en diferentes puestos las cosas siendo malbaratadas. Ni pedo. Algún día la vida se los va a cobrar (eso quiero creer). Ojala y reencarnen en cucarachas.
La inseguridad aquí en México cada día va en aumento, hoy me toco a mí ¿y mañana? ¿a quien?
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