Ya mamá, ya sé lo que es ir y poner tú cara de tonto.

Hace un par de años, cuando hacia alguna pendejada en la escuela y me daban de baja ó me suspendían, mi madre tenía obviamente que ir a hablar con el director, con el coordinador ó con el profesor ó profesora con la que tuve el conflicto. Pero eso si, antes de ir siempre me decía;

-¡Claro! No sientes vergüenza porque tú no tienes que ir y poner tú cara de tonta-

Yo, magnánimo y orgulloso siempre le decía: -Pues no, porque yo no tengo hijos- a lo que ella respondía arrojándome el tacón, chancla, bota, etc, con un movimiento tan rápido que solo se podría apreciar bien en cámara lenta.

Pero hoy, hoy supe lo que es poner mi cara de tonto. Mi estúpido hermano falsifico unas firmas y estaban a punto de darlo de baja si no llevaba a un padre ó tutor, y como último recurso, me vendió su alma para que fuera yo.

Ahora si, por primera vez estaría del otro lado. Llegué a su escuela a la hora del citatorio, y después de que las más pendejas secretarias que he tenido la desgracia de tratar se rompieran la cabeza por indicarme una oficina en una escuela de tres edificios, hable con la orientadora y una maestra, me pidieron que me sentara;

Orientadora: -Pues la situación estuvo así; tú hermano dice que se encontro unas firmas en el baño y que no las falsifico.
Yo: -Uy si, que mal estuvo eso ¬¬
Orientadora: -Entonces, si aplicaramos el reglamento, estaría dado de baja.
Yo: *¡uuuuuuy! ¡El reglamento!* -¿entonces que va a suceder?
Maestra: -Que vamos a hacer un trato, el se va directo a extraordinario y no lo damos de baja.
Yo: *Agrege dos hijas virgenes y cuatro corderos y el trato esta cerrado* -Esta bien.
Orientadora: -Firme aquí.
Yo: -Ya
Maestra: -Eso sería todo.
Yo: -Ok...

Puta, jamás había sentido una perdida de tiempo tan cabrón, ni cuando pase tres horas haciendo planas de "estoy ocioso".

Sniff... por eso jamás voy a tener hijos.